Para el año 1914 la situación del Perú, no era ajena a lo que se vivía en otras partes del mundo, sobre todo por que se tenia conocimiento de la revolución en México y un posible estallido de lo que seria la Primera Guerra Mundial, así los informes de casi todos los países del mundo que indicaban el cierre de las Bolsas de Valores y la corridas de clientes en los principales bancos. Todo esto motivo el retiro de los depósitos en los bancos, la ocultación de la moneda metálica, especialmente en oro, la baja de los valores cotizados en las bolsas europeas fueron factores primordiales para que el gobierno tome acciones para contrarrestar tan mala situación económica.

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El presidente de la república, General Oscar R. Benavides, convoca una reunión en Palacio de Gobierno el 4 de agosto de 1914 con las asistencias de dirigentes de finanzas, del comercio y el parlamento para estudiar la situación. De dicha reunión se envía al parlamento una ley donde, el gobierno ordena a promulgar la Ley Nro. 1968 Con fecha 22 de agosto del 1914, que autoriza a los bancos de toda la república a emitir (billetes) Cheques Circulares al Portador, con valores de ½ Libra, 1 Libra, 5 Libras y 10 Libras peruanas con garantía del oro sellado, valores reales y documentos de cartera, bajo el control de la Junta de Vigilancia constituida por el gobierno.

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Este proyecto de ley permitía emitir billetes pero bajo un nombre distinto, los llamados “cheques  circulares” que era cheques a la orden, emitidos por los bancos autorizados por el estado a cargo de sus propias dependencias, sucursales, agencias o bancos corresponsales sobre una provisión ya disponible descrita anteriormente. Los bancos autorizados por esta ley  fueron: El Banco del Perú y Londres, Banco Italiano, Banco Internacional del Perú, Banco Popular del Perú, Banco Alemán Transatlántico y La Caja de Ahorros de Lima.